En torno a una treintena de agricultores de la zona llevan un año sin agua para regar sus terrenos y el deterioro de las vías está produciendo problemas de humedades en viviendas.

 

Hace un año que el Ayuntamiento de Los Realejos trasladó a la empresa pública del Cabildo de Tenerife ‘Balsas de Tenerife’ (Balten) el informe elaborado por la Gerencia Municipal de Urbanismo en el que se da cuenta de los hundimientos parciales producidos en las calles Placeres y La Romera de Los Realejos, debido a la rotura de la red de aguas insular que da suministro a los cultivos de la zona. El Ayuntamiento sigue sin recibir una respuesta o actuación, mientras los agricultores de este entorno cercano a Palo Blanco no disponen de agua para regar sus terrenos.

“Un año ha pasado y el Cabildo de Tenerife no ha hecho nada para solucionar este problema que afecta gravemente a los agricultores de la zona que no disponen de agua para el riego y a los vecinos que ven como cada día se producen hundimientos parciales en la vía, sus casas se llenan de humedades y circular por esas calles se ha convertido en un auténtico calvario tratando de esquivar baches”, explica el alcalde de Los Realejos, Manuel Domínguez.

“Mientras no se resuelve este problema desde el Cabildo y su empresa pública, son más de 30 los agricultores que llevan un año sin agua para el riego de sus aguacateros, limoneros, papas, trigo y cebada, entre otros cultivos de la zona”, informa el concejal de Desarrollo Rural, Medio Ambiente y Lucha por el Clima, Alexis Hernández.

El informe elaborado por los técnicos municipales recoge que “en los tramos de la vía donde se apreciaban de manera más evidente los hundimientos, se determina que los mismos coinciden con el trazado de la red de aguas de Balten, al tiempo que se observa que se han realizado actuaciones puntuales y localizadas de reparación en dicha red”. Señala Domínguez que “lo que no es de recibo es que los vecinos tengan que pagar las consecuencias de un problema que no es suyo, es un tema que tiene que solucionar la empresa dependiente del Cabildo”.

Continúa el informe explicando que el deterioro en las Calles Placeres y La Romera “tiene su origen en pérdidas de agua que provocan una degradación del material de relleno de zanja empleado en su ejecución y posterior afección a la capa de rodadura, provocando su hundimiento”. Por ello el estudio técnico concluye diciendo que debe notificarse a Balten la situación para que actué “de manera urgente, antes de que llegue la época de lluvia que puede provocar graves daños tanto en el viario como en las edificaciones colindantes”.

La concejala de Urbanismo, Laura Lima, recuerda que “las calles Placeres y La Romera fueron repavimentadas por el Ayuntamiento en el año 2018, justamente un año antes de que surgiera este problema, lo que supuso en su momento para las arcas municipales un desembolso de más de 62.000 euros de nuestro ‘Plan de Barrios’, encontrándonos hoy con un estado del viario totalmente diferente”.

“La solución no pasa por parchear parte de la tubería que ya no aguanta más reparaciones debido a su deterioro, sino que es necesario sustituirla y posteriormente asfaltar la vía, algo esto último a lo que la empresa se niega”, agrega Alexis Hernández.